COACHING ASTROLÓGICO

La Astrología es la ciencia que interpreta el mapa dibujado en el cielo en el momento de nuestro nacimiento. Podríamos decir que hemos venido al mundo con una hoja de ruta de todo aquello que podemos llegar a ser y a alcanzar en nuestra vida. Es como un mapa del tesoro, contiene enigmas y códigos secretos que si logramos descifrar pueden llegar a dar mucho más sentido a nuestra vida. La Astrología ha evolucionado mucho en los últimos años en su vertiente más psicológica, que es aquella que nos aporta mayor autoconocimiento para potenciar nuestra autoestima y clarificar mucho mejor nuestro lugar en el mundo.

El Coaching es una metodología o conjunto de herramientas que guían y acompañan en un proceso de superación personal. A través de este proceso se pueden definir objetivos, establecer metas, superar retos y materializar todo aquello con lo que soñamos, sobre todo aquello que ni siquiera nos imaginamos que podemos llegar a conseguir. En los últimos años, esta herramienta ha venido a complementar el trabajo de la psicología, aportando nuevos recursos para orientar al ser en el camino del logro personal, de la superación y de la consecución de una vida más positiva y plena.

Cuando estas dos metodologías se combinan, se complementan para conseguir mucha más profundidad en la tarea que nos proponemos. Es aquí de donde surge el Coaching Astrológico. Por un lado, trazamos un mapa que nos habla de nuestras cualidades y nuestro potencial; por otro lado, tenemos todas las herramientas necesarias para lograr poner en marcha la maquinaria con la que contamos de origen. Tal y como dice Marta en su testimonio, “podemos conseguir el impulso que necesitamos para trabajar por nosotros mismos“.

En definitiva, la conjunción de las herramientas que emanan de cada una de estas dos disciplinas, muestran tu “maquinaria interior”, que funciona con un cuadro de mandos. Una vez que has identificado cada botón y cada palanca, eres tú quien lo pone todo en marcha. Y llegado a tal punto, el éxito está garantizado. A veces, consiste tan solo en descubrir que tienes mucho más potencial del que creías tener, que eres más poderoso de lo que podías llegar a intuir y que el camino, aunque duro y lleno de obstáculos, es mucho más liviano con un acompañamiento profesional. La decisión está en tu mano… ¿Tú, qué decides?